Hoy día 18 se ha celebrado la ceremonia de entrega de los Premios Tang, la versión asiática de los Nobel. Los Premios Tang, que se celebran una vez cada dos años, han sido creados y patrocinados por Yin Yen-liang, presidente del grupo industrial Ruentex. La Academia Sínica desempeña el rol del comité de jueces.
Días atrás se anunciaba que Gro Harlem Brundtland, ex primera ministra de Noruega y actual vicepresidenta de la Asociación Internacional The Elders, obtenía el “Premio al Desarrollo Sostenible”. El académico estadounidense, el Dr. James P. Allison y el académico japonés Honjo Tasuku, ambos obtuvieron el “Premio de Biotecnología Farmacéutica”. El historiador Yu Ying-shih obtuvo el “Premio de Sinología” y Albie Sachs, ex juez del Tribunal Constitucional de Sudáfrica obtuvo el “Premio al Imperio de la Ley”.
La ceremonia de entrega de los Premios Tang tuvo lugar este mediodía en Sun Yat-sen Memorial Hall en Taipéi. El presidente Ma se reunió con los cinco premiados y el presidente del grupo industrial Ruentex Yin Yen-liang. El mandatario afirmó que Yin Yen-liang continuará elevando el nivel de pensamiento acorde con el espíritu de los Premios Nobel.
Los Premios Tang no solo fomentan investigaciones importantes relacionadas con el ser humano, sino que también contribuyen al desarrollo de la cultura china, consiguiendo así que el poder blando de Taiwán emane por todo el mundo.
El presidente Ma hizo la siguiente declaración: “Continuando con el espíritu de los Premios Nobel y haciendo frente a una nueva educación a la que el mundo está poniendo en práctica, este premio no solo fomentará investigaciones importantes relacionadas con temas humanísticos, también contribuirá al desarrollo de la cultura china, consiguiendo que el poder blando de Taiwán emane por todo el mundo. Admiramos los valores que fomentan estos premios”.
El presidente Ma indicó que los cuatro premios Tang representan la situación de los problemas comunes de la humanidad en un futuro y las áreas de importancia para Taiwán. En lo que tiene que ver con el desarrollo sostenible, aunque la República de China ha perdido su representación en las Naciones Unidas, no participa en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (UNFCCC, siglas en inglés) ni en el Protocolo de Kioto, sin embargo desde que el presidente asumió su cargo, ha quedado claro el compromiso global de reducción de carbono. Además, el Gobierno hará que la industria farmacéutica biotecnológica sea una de las seis nuevas industrias de la isla.
Con relación al sistema legal, el mandatario ha comentado que después de que asumiera su cargo, ha firmado y ratificado el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales. Todos los años se invita a expertos de todo el mundo en temas de derechos humanos para que vigile el desarrollo de Taiwán. El Gobierno continuará adhiriéndose al sistema legal y protegerá los derechos humanos, haciendo de ellos la base para un buen fundamento del país.
El presidente ha expresado que la República de China es un referente de la cultura china, por lo que espera integrarla con las ideas más avanzadas del mundo y desarrollar así la cultura china con características propias de Taiwán.
RTI
