
El terremoto de 6,8 grados de magnitud que sacudió todo Taiwán el último 18 de septiembre con epicentro en Taitung, y del que en los dos últimos días se han producido numerosas réplicas, hace que la ciudadanía esté preocupada por nuevas catástrofes.
Hay una hipótesis de que el epicentro de los próximos temblores pueda estar en el norte. Los expertos han señalado que en la actualidad hay 36 fallas activas en Taiwán, siendo la falla de Shanchiao (山腳), situada junto a la cuenca de Taipéi, la más peligrosa, ya que en caso de que realmente ocurriera, los expertos prevén que una parte de la cuenca de Taipéi se podría colapsar, transformandose en un pantano.
Sin embargo, el director de Vigilancia Sísmica de la Oficina de Meteorología Chen Kuo-chang (陳國昌) aseguró que las réplicas recientes están siguiendo un patrón de decadencia gradual y que cada vez se produciría con un plazo mayor y menos fuerte, y que podrían durar hasta un mes. También indicó que las fallas de Shanchiao no han estado activas durante mucho tiempo, por tanto no hay que preocuparse demasiado.