
Los cuidadores y trabajadores del servicio doméstico procedentes de otros países no necesitarán acudir a una instalación de cuarentena para someterse a los siete días de gestión de la salud al llegar a Taiwán, siempre que la familia que los emplea pueda proporcionarles una habitación con baño. La nueva regulación entrará en vigor a partir del 1 de enero.
El Ministerio de Trabajo recordó que hasta ahora, todos los trabajadores inmigrantes del servicio doméstico debían realizar la gestión de la salud en una instalación de cuarentena o dormitorio. Pero a partir del 1 de enero, si la familia que los emplea puede disponer de una habitación con baño, estos podrán empezar a trabajar desde el primer día. También deberán dar negativo en los test de antígenos realizados a diario.
La regulación que se ha mantenido hasta ahora se ha llevado a cabo teniendo en cuenta que estos empleados trabajan principalmente con personas cuyo contagio se considera de alto riesgo para su salud, pues suelen ser ancianos con enfermedades que no pueden valerse por sí mismos. Sin embargo, el bajo número de casos confirmados entre trabajadores inmigrantes que llegan al país ha convencido a las autoridades sanitarias de relajar esta regulación.
Por otra parte, y también a partir del 1 de enero, el programa de formación previo al empleo para todos los nuevos inmigrantes del servicio doméstico se extenderá durante tres días y dos noches. Hasta ahora, esta formación apenas duraba media hora.