La presidenta Tsai Ing-wen (蔡英文) llegó a Nueva York a las 3 de la tarde (hora de la costa este) del día de ayer. En el aeropuerto JFK fue recibida por la directora del Instituto Americano en Taiwán Laura Rosenberger, la representante taiwanesa en EE. UU. Hsiao Bi-khim (蕭美琴) y el director de la oficina de representación de Taiwán en Nueva York James Lee.
Por la noche, participó en un banquete multitudinario con cerca de 700 expatriados, el gobernador de Nueva Jersey Phil Murphy, la directora del AIT Laura Rosenberger y otros invitados. Durante su discurso, Tsai compartió con la audiencia los logros de Taiwán en los últimos años, comenzando por la resiliencia de su economía en medio de las dificultades de la pandemia, expandiendo la protección social y fortaleciendo la capacidad defensiva de las fuerzas armadas.
También señaló la creciente atención que Taiwán está recibiendo en todo el mundo, dado su papel clave en la economía mundial. La presidenta dijo que Taiwán no solo ha creado un círculo virtuoso gracias a su tratamiento de la pandemia, sino que ha conseguido que más y más países se presten a colaborar activamente con la isla en medio de las tensiones geopolíticas del momento.
Y en último lugar, la presidenta se enorgulleció de los logros diplomáticos de la isla, en especial, la cada vez más estrecha relación con EE. UU. en todos los ámbitos. Tsai aprovechó para agradecer a la Administración Biden los 9 contratos de venta de armas que ha firmado durante su presidencia, señalando que Taiwán colaborará estrechamente con EE. UU. y otros socios democráticos en la protección de la paz y la estabilidad en la región del Indo-Pacífico.
